Ahora que van a volver medidas que limiten la libertad de movimiento de los ciudadanos, conviene recordar uno de los efectos positivos del periodo de confinamiento en la primavera de 2020.
Con el Estado de Alarma que el gobierno de coalición PSOE – Podemos aprobó el pasado 13/03/2020 se recuperó mucha parte de la vida de barrio que se había perdido como consecuencia del ritmo de vida urbano que se llevaba antes del COVID-19.
Las restricciones en la movilidad ciudadana a un máximo de un kilómetro de la vivienda habitual obligaron a pasear y caminar a distintas horas del día por las calles del barrio, permitiendo descubrir a los vecinos toda una serie de obras de arte al lado de la puerta de su casa. Persianas llenas de vida que muestran al viandante que ese comercio no tiene sólo la razón de ser un lugar de simples transacciones económicas.
Desde carnicerías a restaurantes exóticos, desde talleres de yoga hasta ultramarinos de 24 horas, desde peluquerías hasta panaderías, desde talleres de cerámica y mosaicos hasta escuelas de teatro. Toda una serie de comercios que reflejan la voluntad de sus propietarios de convertir el barrio en un enorme pero cercano museo de arte contemporáneo al aire libre, cuyos principales visitantes ya no son los turistas sino el vecino del quinto.
Aquí va una galería de 15 obras de arte que se pueden contemplar en el barrio de Gràcia de Barcelona:
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