Con la reafirmación por parte de los organizadores del ISE y del MWC en su intención de celebrar de manera presencial las ediciones del 2021 en la Fira Gran Via, Barcelona recupera la posición de la ciudad como destino top de turismo urbano y profesional.
Un modelo turístico de éxito que se estaba empezando a resquebrajar por la fuerza destructiva que tiene el turismo de masas descontrolado. Una fuerza que convierte los destinos en meros parques temáticos que, debido a los efectos de la globalización, se parecen cada vez más entre sí. La principal consecuencia de esta homogeneización es la pérdida del activo más potente que tiene un destino: su única personalidad que ejerce de potente atracción a los visitantes, que tienen como principal objetivo conocer lugares y maneras de vivir distintas de su cotidianidad.
La recuperación de Barcelona como ciudad cosmopolita, orgullosa de su enorme patrimonio artístico y cultural a la vez que incesante generadora de nuevos contenidos culturales tanto para la población local como para los foráneos es la principal conclusión del Fórum de debate “Ciutat, Turisme i Cultura”, que se celebró el pasado 20 de enero de 2021 en el Disseny Hub, organizado por el Ajuntament de Barcelona. Esta recuperación se enmarca dentro de una nueva perspectiva del turismo centrada en la economía del visitante y el retorno de la actividad económica generada por el turismo al destino local. Retorno que, por ejemplo, permitiría extender y potenciar en toda Barcelona una iniciativa privada como es la conversión de las grises persianas de los comercios de la ciudad en enormes lienzos de arte urbano para seguir potenciando la cultura y el arte como imprescindibles compañeros de viaje en este largo camino que son nuestras vidas.















